Pablo Y Silas

Pablo y Silas en Filipo
El evangelio predicaban;
Como testigos de Cristo
Ellos no se avergonzaban;
Fueron puestos en la cárcel,
Y sus cuerpos azotados,
Y sus pies en el cepo
También se los apretaron.
            Coro
Pero dios que esta mirando,
Y atento a la oración;
El Señor envío a su ángel,
Y la cárcel les abrió.

Pablo y Silas muy contentos,
De gozo no se dormían;
Oraban, cantaban himnos,
Y los presos los oían;
Y como a la media noche
Orando ellos al Señor,
El Señor envío a su ángel
Y la cárcel les abrió.

El carcelero asustado
A Pablo se dirigió;
¿Hermanos varones que hago
Para hacerme salvo yo?
Luego Silas le contesta:
¿Hombre que es lo que te pasa?
Cree en el Señor Jesucristo
Y seras salvo tú y tu casa.

El carcelero muy gozoso
A Pablo se dirigió;
Los llevo para su casa,
Los azotes les lavo;
Luego les puso la mesa,
Ya sus cuerpo sustentados,
Siendo ellos bautizados
Como Cristo lo ha mandado. 
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Hechos 16:25 Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. 26 Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron. 27 Se despertó el carcelero y, al ver abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada y se iba a matar, pensando que los presos habían huido. 28 Pero Pablo le gritó: ¡No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí!